El afilador

Mi vecina Mª Carmen nos ha dado una vieja foto de nuestra calle, la calle del saco. En ella se ve a uno de aquellos antiguos afiladores en la puerta de casa. Y detrás una mujer que bien podría ser mi abuela Angelita. No podemos saberlo a ciencia cierta, pero tiene su aire.
Así que he aprovechado que le tenía mucha tirria a un marco doradísimo que andaba por casa para transformarlo en un soporte perfecto para la fotografía. Para darle un lugar de honor.